"NOSOTROS: LOS AFORTUNADOS" por Alicia Rosell
"NOSOTROS: LOS AFORTUNADOS"
Hoy es 1 de Mayo: "Día Internacional de los Trabajadores o Primero de Mayo”. En España, además es el "Día de la Madre" por ser primer domingo de "mayo florido", el Mes de las Flores, y de la Virgen en la tradición católica. Hoy se ha beatificado a Juan Pablo II, al Papa más joven de la Historia. Estamos viviendo un día "señalado". Pero no lo son menos el resto de días del año mientras continuemos bajo la sombra de la violencia de todas clases y el hambre, la mentira, la envidia, la hipocresía, el dolor y los asesinatos...
Mañana será otro día... Ojalá el día que ya fenece en Europa y aún a estas horas dura en América, sirva para cambiar el rumbo de tantos desmanes personales y colectivos. Ojalá la vida se renueve en este que es el "Año Internacional del Árbol o los Bosques, 2011". No dejemos los buenos propósitos solo para finales de año, creo que ya muchos nos dimos cuenta que es una mala costumbre, pero que aún podemos cambiarla.
Quiero, de hoy, nombrar estos acontecimientos para recordar en días venideros que la Vida continúa aunque muchos ya no estén. Y sentir en mi corazón, al revivir este 1 de Mayo de 2011, que celebro el advenimiento del fin de las lacras que nos asolan aunque luego deba contradecirme al recordar que no hemos cambiado desde la Noche de los Tiempos, cuando pisamos por vez primera la tierra de nuestro planeta.
Pero antes de darle colofón a mis palabras que pocos leerán por ser HOY, deseo rememorar el "hoy que fue ayer" o del "antes de ayer". Recuerdos para la memoria colectiva que me llenaron de felicidad cuando Ana María Matute recibió el merecido PREMIO CERVANTES por su excelsa carrera literaria; O de la no tan agradable otra noticia que nos llegó con la muerte y pérdida de Ernesto Sábato -al cumplir casi la centuria de edad-, por su trayectoria impecable literaria y su compromiso en la lucha contra la ignominia en su país en época de dictadura.
Por todos estos hechos y muchos más, propios, personales, intransferibles, insoslayables... dejo mis palabras en este papel virtual que me roba la dicha de escribir en libretas cuando podría hacerlo y no lo hago, mea culpa, por comodidad; aunque me exculpo pensando que es la mejor forma de ahorro de tiempo, y tal vez de papel, árboles, bosques, oxígeno al fin... que nos permite aún, todavía, sin fecha en el calendario, poder respirar. Vivir. Nosotros, los afortunados.
No puedo olvidarme -nunca lo haría- de cuantos escritores/as, editores/as, libreros, están desde hace días y lo estarán todavía durante unos cuantos, en las casetas de las "Ferias del Libro" de sus ciudades y países, firmando y vendiendo los "Hijos de su Creación" para lanzarlos al único y mejor postor: el LECTOR. Porque un libro siempre estará mejor en las manos de quien lo disfruta que adornando las estanterías de las Librerías. Y cuando están en la calle, en la caseta con su autor al lado, es cuando se cumple la misión del Oficio de Escribidor.
Para todos, felicitaciones. Ha sido un MES DE ABRIL repleto de sorpresas y con muchos momentos álgidos dignos del recuerdo. Hemos celebrado el "Día Internacional del Libro y los derechos de autor" el 23 de abril; yo cumplí años el 21 de abril y renové mi conciencia de un año más vivido... y uno menos que vivir. Estamos en MAYO, mes de las flores.
Ha pasado la Semana Santa y aún martillea en mis oídos la música procesional del redoble de tambores y el gemido de trompetas. Ha llovido mucho en España, las tormentas y el granizo perduran más allá de la frontera de ABRIL y el comienzo de MAYO. Con viento y relámpagos; en días alternos, bajo un "sol de justicia".
Ha sido un mes tan intenso, el fenecido de "aguas mil", que ya no me quedan los primeros recuerdos del 3 de abril: fecha en que celebré el tercer aniversario de mi hermosa obra hispánica, La Voz de la Palabra Escrita Internacional... Sí quedan, para siempre, los comentarios, los correos que recibí felicitándome, las llamadas de teléfono, los “sms” o las cartas escritas “a mano”. Gracias. Es un gozo vibrar con LA PALABRA VIVA siendo la capitana de las huestes que son todos los miembros escritores que la conforman.
Adiós ABRIL. Bienvenido MAYO. Que el día de hoy, tan señalado, no desmerezca de los treinta que le restan. Por mi parte, si no todos me sirvieron de aprendizaje, sí puedo decir que por falta de experiencias, no fue. Pero estos, mi estimado lector, son los únicos que no deseo sean recordados ni permanezcan en mi memoria excepto para dejar de practicar lo que ya se me inculcó por sí solo a través del pálpito lógico de la supervivencia.
Bendito sea por hoy este día 1 y los treinta del mes de abril, porque de todos y cada uno de ellos, renací. Y no resucité como Jesucristo, no. Si acaso, desperté del aletargamiento al que me avocó la estupefacción del proceder ajeno, la misma que me sacó de mi "bonne affaire" por unos días.
Que MAYO les sonría a todos. Sean felices. Es todo, por ahora. Gracias a quienes al leerme, llegaron hasta este "punto y final".
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